¿En verano hay más infidelidad?

No sé ustedes pero yo en verano sufro el síndrome del “promiscuo playero“, es decir, querer acostarme con todo ser atractivo que vea en paños menores, porque ya en verano con el sol encima y de vacaciones, todo el mundo sale a perturbar la mente de los inocentes que trabajamos. Aunque siendo soltero no ponga en práctica el tener sexo con todos, por diversas razones, me pregunto como hacen las parejas en ésta temporada del año.

Para ser infiel no importa la estación que sea, es obvio, pero en verano, se crean todas las condiciones para ello, o al menos incrementar las posibilidades de serlo, como el lugar paradisiaco de una bonita playa de cielo azul, donde hay cantidad de gente de buenos cuerpos, uno más buenos que el otros, casi desnudos, con un short usado cada vez más y más bajo que de un tirón se cae, con el cuerpo bronceado, cerca a uno, donde algunos de ellos los puedes conocer por amigos, o por el incremento de reuniones, cumpleaños, fiestas y cualquier motivo que se da por ser vacaciones y que hay tiempo para divertirse y hacer amigos, entre otras cosas. Si eres soltero, es la gloria, si no, es el infierno.

Entonces si hay todas las condiciones, para al menos, tener una inocente fantasía mental a un encuentro carnal real, pueda ser que al tener todo a pedir de mano ¿sea argumento justificable para ser infiel?, o, ¿será suficiente el estar enamorado para vencer las hormonas calenturientas que nos aturden la razón e idiotizan los sentidos para seguir como animales nuestro libido? (no sé si los animales lo tengan, pero sé que ellos usan sus instintos,y nosotros en muchos casos también).